Grabando con los Layabouts – Capítulo II

Como anuncié ayer, quedan un montón de cosas que contar y espero hacerlo igual de bien que en el post anterior, que me valió alguna felicitación.

Ayer os intentaba describir el contexto en el que Layabouts van a grabar su disco. Hoy voy a comenzar por lo que fueron las primeras sesiones de grabación.

La cosa empieza pronto. A las 9.30 horas estamos todos en pie en torno a la mesa de la cocina de Paco para desayunar. Hay café normal, descafeinado, leche, cola-cao, fruta, cereales, magdalenas, croissants… De todo. El primero en levantarse de la mesa es Paco, que se va directo al estudio para ir preparándolo todo. A continuación vamos todos nosotros.

Antes se ha decidido la forma de trabajar. ¿Por pistas o en directo? La grabación por pistas significa que primero se graban unas guías para el batería y luego ya va tirando éste con sus tomas. Después se graba el bajo, después las guitarras, sintes… y las voces se dejan para el final.

La grabación en directo se ejecuta con todos los miembros del grupo tocando a la vez. Es un buen recurso cuando una banda no tiene muchos días para grabar.

Layabouts han optado por la primera opción, la grabación por pistas, pero en lugar de hacerlo como lo suelen hacer la mayoría de los productores, es decir, primero todas las pistas de batería de todas las canciones, luego todas las de bajo, luego las guitarras, etc, Paco Loco ha optado por grabar por grupos de dos o tres canciones. O sea, el batería graba las baterías de un par de canciones, luego se graba el bajo de las dos y así sucesivamente. Lo único que se deja para los últimos días son las voces.

El primer día los chicos se han ventilado dos canciones. Primero empezó Víctor, que se tiró unas horillas grabando las baterías; luego Jon con el bajo, que lo hizo en un periquete; a continuación Javi y Rober, con las guitarras. A Rober se le atragantó un poco un riff de una de las canciones… Y finalmente grabó Martí con sus sintes.

Está muy chulo ver cómo las canciones van tomando forma poco a poco y ver cómo van cambiando de su estado original, tal y como sonaban en el local, al sonido acabado en el estudio, con elementos añadidos.

Todo se intenta hacer más o menos calculado. Se elige una guitarra u otra y los amplis en función del sonido que se busque. Y luego están los pedales de efectos. Que si una distorsión más “guarra”, que si este delay…

Paco suele tener ideas muy buenas y, en mi opinión, funcionan todas bien. Propone las guitarras, los amplis o los pedales, para buscar el sonido apropiado, pero también propone cambios en las canciones: cambiar riffs, cambiar redobles de batería, etc. Él los propone y el grupo decide si los mete o no.

Las primeras canciones que medio terminaron (a falta de las voces) fueron “Stop the reply” y “Rat in a lab”. Me encantaron los sintes que metieron… en la pimera, creo recordar. Empezó Martí a meter sintes por un lado, órganos por otro, y aquello fue tomando unas dimensiones… La verdad es que estoy deseando ver el resultado final y escuchar el disco, porque va teniendo muy buena pinta.

Las sesiones de grabación con Paco son largas. Comenzamos a eso de las 10.00 y terminamos pasadas las 22.30, con el Barça eliminado de la Champions por el Liverpool y el Valencia pegándose a puñetazo limpio con el Inter de Milán.

Y tras una larga sesión de trabajo lo mejor es reponer fuerzas con una magnífica cena. Como dije en el post de ayer, de las cenas se encarga Muni y qué bien lo hace. Cuando nos sentamos a la mesa, estaba llena de fuentes con distintos platos.

Había pasta al pesto, arroz con frijoles, un par de ensaladas, solomillitos de cerdo, lomo de cerdo adobado… Y estaba todo para morirse. Y de postre fruta, o yogur de mango o yogur griego, según las perversiones que le vayan a cada uno.

Muni y Paco se van a descansar (o ver la tele, jugar al Guitar Hero o lo que les dé la real gana) y nosotros pasamos a nuestra casita de músicos, donde tenemos nuestras provisiones: bebidas espirituosas y cigarritos de la risa para el que quiera consumir…

Al día siguiente volvemos a encontrarnos todos sobre las 9.30 para desayunar e inmediatamente después, a grabar. El plan de trabajo es de tres canciones para este día. A Víctor se le atraganta un poco la batería, la claqueta se le va un poco pero después de unas cuantas tomas y un par de cambios propuestos por Paco, lo clava. Se tira toda la mañana grabando baterías... ¡qué cansado!

Hubo un parón a mediodía, cuando Pacto tuvo que marcharse a Conil a buscar un ampli y los Layabouts aprovecharon para hacerse unas fotos de promo en un paisaje un tanto desértico que estaba cerca de casa de Paco. Después, comida de McDonalds para llevar y comer en el propio estudio, que no quedaba tiempo para más.

El siguiente en pasar a grabar, como el día antes, fue Jon. Grabó los bajos en un santiamén y enseguida se puso Rober con las guitarras. No pude quedarme a todo, porque el jueves tenía que trabajar bastante temprano, así que no sé cómo acabó la cosa el segundo día de grabación. Pero este viernes espero llegar por allí a eso de las 20.00 y ver las últimas horas del día y con el fin de semana intentaré escuchar lo que hayan hecho estos días.

Ya os contaré.