Noche de hip hop


El pasado miércoles se presentaba en Madrid un disco de hip hop en el Star Café de Serrano Jover. Invitado a tal evento y ante la curiosidad que me despierta una cita musical de este estilo -lo más cerca que he estado de un concierto de hip hop es en un par de actuaciones de Facto Delafé y las Flores Azules- encaminé mis pasos hacia la sala, eso sí, acompañado por FDR y Escobar, el auténtico experto en hip hop de mi círculo más cercano -sin contar, por supuesto, a mi queridísimo DJ Zost-, que es quien firma la crónica que sigue a continuación.

Yo tengo que decir que no se trata de uno de mis estilos favoritos. Sin embargo, me quedé con la copla de dos o tres temas que me engancharon.

Nosotros lo hicimos, quién si no

Tras cuatro años de silencio encerrados en el Hospital Psiquiátrico del “Pescadero” (su lugar de retiro), Locus y Nerviozzo, la extraña pareja que componen el grupo madrileño Dúo Kie, celebraron su décimo cumpleaños con un espectacular directo presentando “21 cm.”, su disco definitivo.

La cita era en la Sala Star Café de Madrid, perfecta para un íntimo directo. Pero la apisonadora de ritmos y rimas insultantes, machacaron los oídos y sorprendieron a los críticos más exigentes.

Comenté a mis acompañantes la razón del titulo del disco, en un alarde de cultura que nunca queda mal. No es raro que les gustase la película "21 gramos", pero sí sugerir el tamaño de un miembro viril es la mejor forma de reírse de la muerte. Al menos curioso a mí si que me lo resultó.

En cuanto al ambiente de la sala era el esperado. Muchas chicas, casi todas acompañadas, puretas que no sabían dónde estaban y multitud de la última hornada de raperos que cercaban el escenario esperando a su grupo favorito.

Por fin llegaron los scratches de Dj Cancer, que fueron el pistoletazo de salida al espectáculo, un show que pretende dar a la violencia un punto divertido, demostrando que no está tan mal, aunque seas tú el que pierdes. (Filosofía muy “El club de la lucha”).

Pronto las nucas empezaron a moverse. Con los primeros temas, la pista se fue calentando, los chavales en las primeras filas no bajaban sus brazos y sus novias tarareaban las sencillas letras pero a la vez críticas y punzantes, ya abordan cada tema con el claro estilo del grupo: “Reírse de todo lo que no pueden cambiar”.

Tras temas como “Falsa sensación de calma”, “He visto el futuro” o “Yeah” (que comenzó con todos los presentes gritando los pegadizos estribillos, que se quedan rápido por su carisma y sencillez), la gente empezó a divertirse, dando cabida a muchos oídos que normalmente no escuchan rap y que disfrutaron con las rimas y el perfecto bombo de los altavoces.

“Sólo nosotros podíamos hacer una mierda tan grande”, reconoció Nerviozzo (que va a ser padre próximamente) durante una pausa, antes de que Cáncer pinchase el tema que hizo que la sala vibrase.

Con “En el club con 50 céntimos”, el gesto de los críticos cambió con las primeras rimas porque ¿quién no se ha visto pelao en un garito?. Se olvidaron del nombre del grupo y levantaron el puño con el estribillo al unísono con la plebe mientras bailaban sin importar que algún conocido le viese.

Ya con la gente en sus manos Dj Cáncer nos demostró por que es el perfecto guardaespaldas del dúo y mostró el notorio salto de calidad que ha dado el grupo con sus manos en los platos.

Con unas espléndidas series de scratches y cortes, dio el tiempo suficiente para que Locus y Nerviozzo se vistiesen con sus mejores galas para la sacudida final del concierto.

De rojo pasión salieron a la pista acompañados de su próximo himno, "Nosotros lo hicimos" (“Alzad vuestras copas síííí”) , que Locus estira con su peculiar gesto de recién salido del López Ibor, mientras recreábamos las escenas del su ultimo y polémico video clip donde se suicidaban escuchando el consejo de los MC´s.

Al son del acusador estribillo, “Nosotros lo hicimos, quién si no”, consiguieron que el Star Café pareciese un abarrotado estadio, donde rodeado de enormes raperos, te gritaban a tu espalda mientras te empujaban y no paraban de sudar. En dos palabras, im precionante.

La nota humilde la pusieron mostrando que siguen pisando el suelo, con su característica naturalidad. Pincharon un tema mucho más bailable (que reventaría las pistas de baile en NY o LA en estos momentos) y se tiraron al público, empujando y bailando como uno más, dejando un gran sabor de boca en cada uno de los asistentes y mejorando sin duda la opinión que tenían de este divertido grupo.

Escobar

Aquí el polémico vídeo de Duo Kie que ha sido censurado en más de una cadena de televisión.