Entre los nominados a los Oscar este 2013 se esconde una auténtica joya.
La historia que cuenta es la siguiente: un músico, curtido en la escena del Detroit de los años 70, publica dos discos que a pesar del talento que desprenden no compra prácticamente nadie.
Tras ser despedido por la compañía, se retira para llevar una vida anónima.
Fin de la historia... o no.
Porque años después, sus canciones llegan hasta Sudáfrica donde se convierten en banda sonora del movimiento anti-apartheid. Allí vende miles de discos y es elevado a la misma categoría de Bob Dylan o los Beatles sin que nadie tenga ningún dato del misterioso músico que se esconde detrás de esos álbumes.
Lo mejor es acudir totalmente inmaculado al visionado del mismo, pero por si alguien quiere echarle un vistazo previo, aquí está el trailer.
Imposible tras verlo no quedar prendado por la figura y la música de Sixto Rodríguez.
Eterno agradecimiento a su director, Malik Bendjelloul, por haber descubierto al mundo esta maravilla de canciones.